Dálmata

Son esas manchas las que definen al dálmata. Esas manchas redondas y negras o marrones sobre un fondo blanco, lo distinguen. Pero el dálmata además es musculoso, de cola y piernas fuertes, orejas altas y ojos redondos. La nariz puede ser negra, azul, gris oscura o color hígado. Tiene pelo corto, duro y liso. Mide de 19 a 23 pulgadas de altura.

Es juguetón, amable, cariñoso y muy enérgico. Son buenos con los niños, pero resultan demasiado ruidosos para hogares con niños pequeños, por lo que sería el más adecuado para una familia con niños mayores. Son grandes animales domésticos que necesitan ser parte de la familia. Los Dálmatas que están confinados a un patio o perrera lejos de las actividades de la familia, frecuentemente se convierten en ladradores o excavadores. Se llevan bien con otros animales y son buenos perros guardianes.

Son muy inteligentes, cariñosos y juguetones. Se relacionan muy bien con los niños y con otros perros, siendo muy buenos perros de compañia. Necesitan mucho espacio y ejercicio. Han sido de gran utilidad para loa bomberos americanos e ingleses que los utilizaban para cuidar el parque y como ayuda en los en los incendios, donde demostraban gran valentia y no dudaban en atravesar la llamas para rescatar personas.

Perro cuyas manchas nunmulares (pequeñas y redondas) constituyen un rasgo distintivo. El Dálmata es un perro bien proporcionado, fuerte, musculoso, activo. Armonioso en sus líneas, no es nada grosero ni pesado. Es un perro de cuadrilla de hermosa prestancia, que puede dar pruebas de mucha resistencia y es capaz de moverse a un ritmo rápido. Es de temperamento sociable y amistoso, ni tímido ni desconfiado, ni miedoso ni agresivo.

El Dálmata es testarudo, independiente, amistoso y payaso. A pesar de la fama de rebelde, este es un perro con una gran capacidad de adaptación y aprendizaje. De pequeño se le ha de educar con firmeza ya que es fácil que coja malos hábitos y que luego cueste corregirlos. Le gusta correr, saltar, jugar y sentir la presencia y el afecto de los dueños. Con los niños es muy dulce y se adapta perfectamente a sus juegos.